Los polinizadores son de gran importancia para la naturaleza, dado que su actividad conlleva la producción de alimentos mediante la reproducción de las plantas, por lo tanto habrá más follaje y por lo tanto se generará más oxígeno que tanto beneficia a los habitantes del planeta.


Por Felipe de Jesús Becerra Guzmán
Apicultor y Profesor Investigador Titular C, UdeG. Representante No Gubernamental Comité Estatal Sistema Producto Apícola Jalisco. Presidente Rama Industrial No. 75 Canacintra
El insecto polinizador más identificado son las abejas melíferas, encontrando adema abejas nativas, abejorros, mariposas, aves como los colibrís, mamíferos como los murciélagos; se estima que el 70% de los alimentos en nuestra mesa tienen un impacto con los insectos polinizadores, ya que estos mejoran la producción de los vegetales.
Uno de los grandes retos de la producción agrícola es producir alimentos para lo que destinan grandes superficies y la agricultura tecnificada permite crecer en una región una gran cantidad de plantas, lo que puede generar gran cantidad de agentes patógenos que generan pérdidas de cosechas.
Por eso las empresas buscan con qué controlar las plagas, pero el uso continuo genera la resistencia a esos productos, lo que provoca nuevas familias de plaguicidas, por lo cual actualmente existen más de 200 diferentes fórmulas para controlar plagas. El primer insecticida fue el DTT, que está prohibido por su toxicidad y efectos residuales, pero para plagas resistentes, hay nuevas familias de plaguicidas organoclorados, organofosforados, carbonatos, piretroides y neonicotinoides.
A mayor resistencia de la plaga hay productos más fuertes, por ende, más dañinos para los insectos polinizadores y existe una gran cantidad de reportes de muerte de colonias de abejas y no hay un solo responsable.
Uno de los grandes dilemas de la producción agropecuaria es generar alimentos para los mexicanos o dejar de usar productos altamente tóxicos, lo que generaría pérdidas en las cosechas y por lo tanto no habría alimentos suficientes para todos.
Ante esta realidad, lo que tenemos que hacer es establecer un puente de vinculación y de trabajo entre los agricultores y los apicultores, dado que los agroproductores se benefician de la polinización de las abejas; estamos requiriendo que las asociaciones de agricultores establezcamos acciones conjuntas con los apicultores de manera que mejoren los manejos, las dosis y realicen la aplicación de los productos de forma coordinada con los apicultores.


Un agricultor debería de informar al apicultor que va a fumigar para cerrar las entrada de sus colmenas y evitar la muerte de las abejas; el uso de productos menos tóxicos, fumigar por la noche, no fumigar en épocas de floración; también informar el tipo de aplicación sí es mochila, si es dron o si es avioneta, porque cada uno de ellos impacta de manera diferente, pues se ha reportado que las gotas de una aspersión, liberada por una avioneta fumigadora, vuela por más de tres kilómetros, lo que provoca muerte de apiarios completos a una gran distancia de donde se realizó la fumigación… y nadie asume su responsabilidad.
Son muchos los aspectos que se requieren considerar para el cuidado de los polinizadores, hace falta comunicación, coordinación y capacitación entre agricultores y apicultores para coordinar acciones que permitan buenas cosechas y que las abejas no sean muertas en los cultivos; ocupamos trabajar en conjunto.
Los apicultores organizados estamos insistiendo ante las autoridades gubernamentales para buscar acciones concretas y soluciones a esta problemática; la Secretaría de Agricultura ha establecido la Estrategia Nacional para la Conservación y Uso Sustentable de los Polinizadores (ENCUSP) en conjunto con la Secretaría del Medio Amiente y se han formado grupos de trabajo para establecer la conservación de polinizadores.
El CONAHCYT, en conjunto con algunas entidades como el ECOSUR, han desarrollado un Protocolo de Acción ante la muerte de las abejas; desafortunadamente solo hay acciones en el papel y las abejas siguen muriendo en el campo, porque existen productos altamente tóxicos que son mal utilizados.
Que sean las dependencias gubernamentales las que hagan los diagnósticos pertinentes para evitar más muertes de colonias de abejas porque en este momento el protocolo solamente nos indica cómo hacer un reporte de colonias muertas, pero no ha planteado cómo evitar que las abejas mueran; para eso se requiere un trabajo en conjunto entre agricultores, gobierno, universidades y los apicultores para que podamos tener mejor producción de alimentos sin la aplicación de tantos agrotóxicos


Debe existir un puente de vinculación y de trabajo entre los agricultores y los apicultores, dado que los agroproductores se benefician de la polinización de las abejas; estamos requiriendo que las asociaciones de agricultores establezcamos acciones conjuntas con los apicultores de manera que mejoren los manejos, las dosis y realicen la aplicación de los productos de forma coordinada con los apicultores.