Ing. Andrés Canales Leaño | Director General Multimedia Editorial Tierra Fértil

Al acercarse el 90 aniversario de la Universidad Autónoma de Guadalajara y rumbo a su primer centenario como la primera universidad privada de México y baluarte de la libertad de cátedra, preocupada siempre por llevar los avances tecnológicos al campo, impulsados en su momento por mi abuelo, el rector emérito, licenciado Antonio Leaño Álvarez del Castillo (Q.E.P.D.), me es grato ser un egresado de mi Alma Máter, impulsora del sector agropecuario estatal y nacional. 

Don Antonio Leaño se esforzó por convertir a la UAG en una universidad vinculada al campo, pues en su experiencia de vida, al recibir como pago por honorarios profesionales unos terrenos agrestes en el Valle de Tecomán, Colima, junto con un entusiasta grupo de 600 empresarios jaliscienses y colimenses, impulsó la agricultura, acompañado de personajes como mí también tío Juan José Leaño Álvarez del Castillo. 

Primero se convirtieron en agricultores y después en agroindustriales para enfrentar el reto de tecnificar pantanos insalubres en un emporio agropecuario que llevó el progreso a los agricultores de la región con cultivos tecnificados de coco, plátano y limón, entre otros frutales, además de criar ganado bovino Brahman.

De ese esfuerzo y unidad agrícola, mi abuelo dijo en su momento: «Vienen a mi mente los recuerdos, el arduo trabajo de siembra, principalmente de árboles frutales tropicales. Luego la lucha dura para lograr un justo precio para los productos de la región, de eso dependía mantener vivas las fuentes de trabajo, el proyecto todo…». 

«La lucha por la legalidad, la tenencia de la tierra y el respeto, la formación de la Asociación General de Agricultores del Estado de Colima, A.C., creada para defender los legítimos intereses de sus asociados, luchando incansablemente para inducir al cultivo y la producción agrícola». 

«¡Cómo olvidar aquellas angustiosas situaciones que pasamos los agricultores para el pago de créditos y la respuesta del Gobierno Estatal y la voluntad del Gobierno Federal para acudir en auxilio de los productores agrícolas, para la reestructuración de sus créditos para que fueran propietarios rurales o ejidatarios!», declaró en su momento Don Antonio Leaño Álvarez del Castillo.

La UAG, acorde a la visión de mi abuelo y sus fundadores el 3 de marzo de 1935, siempre impulsaron la agricultura, la ganadería, el desarrollo del campo mediante la unidad, la defensa común de intereses y la aplicación de la tecnología, que hoy se ve reflejada en un moderno ecosistema educativo con carreras y centros de investigación y desarrollo del más alto nivel que responden a las necesidades de nuestro campo en Jalisco y en México. 

La protección del medio ambiente, el cuidado de los recursos y la producción de más con menos, así como la investigación y la aplicación de las nuevas tecnologías, forman parte de las distintas carreras impartidas en la Institución educativa, que fortalece su actuar por el campo con organismos como CITSIA, centro de valor agregado para la industria alimenticia.

La UAG busca con CITSIA, Innovación Tecnológica en Alimentos, con su tecnología de punta e innovación, apoyar las soluciones a los retos del sector agroalimentario al brindar soluciones de alto valor, diferenciadas, sustentables y que promueven un consumo responsable para un mejor futuro del sector agroalimentario con servicio 360 grados personalizado para apoyar a los agroproductores del sector.

Su campo experimental de Tlajomulco y la investigación académica forman parte de este gran ecosistema académico de la Universidad, que le da un valor agregado a nuestro campo y que está presente en las 12 líneas estratégicas y 32 programas diseñados para impulsar y consolidar el sistema educativo de la institución en los próximos años.

Su prestigio internacional, la expansión de su sistema educativo y mediante el ecosistema que busca crear dobles titulaciones con Arizona State University (ASU) y aliados en la red Cintana en más de 40 países, como lo ha señalado el rector, licenciado Antonio Leaño Reyes, permite proyectar la educación de la UAG a niveles de excelencia.

Con esa visión de apoyar a nuestro campo, la UAG y su impulso de los valores, permitió, junto con otros líderes del sector, el desarrollo de asociaciones como el CDAAJ, además, ha promovido la capacitación y actualización académica de distintos ramos agrícolas, como el tequilero, al impulsar, junto con el CAJ, varios diplomados, entre ellos, la maestría tequilera, entre otras carreras del sector agropecuario, para garantizar la viabilidad de nuestro campo y enfrentar los nuevos retos globales en la producción de alimentos.

El campo jalisciense, para proseguir como gigante agroalimentario, necesita de instituciones como la UAG, catalogada como la primera universidad privada de México y entre las mejores universidades de Latinoamérica.

Sin dudarlo, Jalisco necesita trabajar de manera colaborativa con la academia para avanzar en las estrategias de innovación para ser más agresivos en afrontar los retos del sistema agroalimentario de la nueva era.

Por ello, al acercarse el 3 de marzo y los festejos de su 90 aniversario, felicito a mi tío, el rector de la UAG, licenciado Antonio Leaño Reyes y a todos los integrantes de la Universidad Autónoma de Guadalajara por mantener de manera permanente los postulados de apoyo al campo, Institución que siempre estará vigente como el «Milagro cultural de América», como la calificó el filósofo, educador, abogado, escritor y político José Vasconcelos.

Dejar un comentario