Descubre cómo mejorar el cultivo del pimiento en México con esta guía completa sobre variedades, técnicas en invernadero, requisitos de suelo y agua, y datos clave de exportación…
Por Amado Vázquez Martínez
El pimiento, conocido científicamente como Capsicum annuum L var., es uno de los cultivos más relevantes en la agricultura protegida y a campo abierto, cuyo origen, aunque controversial, es motivo de orgullo cultural, especialmente en México, donde estudios lo vinculan al estado de Oaxaca y a más de 6,500 años de tradición agrícola.
PANORAMA GLOBAL
De acuerdo con el INEGI y Sader federal, en 2024, las exportaciones de pimientos alcanzaron un valor de mil 845 millones de dólares, lo que representa un crecimiento del 15.9% respecto al año anterior.
Con respecto a la superficie sembrada, se mantiene en niveles similares a 2021, con más de 26 mil hectáreas, destacando los estados de Sinaloa, Jalisco y Guanajuato como principales productores
En agricultura protegida, este cultivo ofrece rendimientos mayores, alcanzando hasta 28 kilogramos por metro cuadrado en invernaderos de alta tecnología con control de clima, agua y humedad.

CARACTERÍSTICAS
Crujiente, carnoso y de sabor suave, el pimiento presenta una amplia gama de colores y tipos, como el morrón, el italiano y el snack. Además, es una fuente destacada de vitaminas C y A, potasio y antioxidantes.
Al respecto, Joel Hernández Ortiz, ingeniero agrónomo experto, recomienda utilizar sustrato de coco en macetas dentro de invernaderos para asegurar un mayor control de nutrientes y prevenir enfermedades.
Con respecto al agua, el cultivo requiere entre 4 y 12 litros diarios, dependiendo del tipo de sustrato y del suelo, debe ser franco-arcilloso, con un pH de entre 6.5 y 7 y contenido orgánico del 3 al 4%; mientras que la temperatura promedio ideal es de entre 6°C y 30°C, con humedad ambiental del 60%.
Las variedades más comunes en México incluyen el tipo Blocky y Lamuyo y los colores rojo, verde y amarillo, cuyos ciclos de cultivo suelen ser de 54 semanas, donde factores como radiación y demanda del mercado (nacional o exportación) determinan el tamaño y color del pimiento.
Por normativas estrictas de Senasica y de USDA, para el producto que se exporta principalmente a Estados Unidos, se evita el uso de agroquímicos y en caso necesario, se realizan fumigaciones cada 15 a 20 días, principalmente en invernaderos sellados.
El pimiento dulce no es solo un ingrediente indispensable en la cocina internacional, sino también un ejemplo de la innovación en la agricultura moderna. Conocer y aplicar las mejores prácticas, asegura un cultivo exitoso y de alta calidad.