Es necesario que los gobiernos apuntalen las políticas públicas encaminadas a lograr una mayor y mejor producción agropecuaria

Raúl Torres Lugo

 

Para que un país alcance metas tan ambiciosas como la autosuficiencia alimentaria es imprescindible que su gobierno apuntale políticas públicas encaminadas a lograr una mayor y mejor producción agropecuaria, a fin de disminuir la dependencia de comida e insumos producidos en el exterior, que en el caso de los costos de granos y oleaginosas, representa en algunos subsectores del 70 al 100 % del paquete tecnológico.

Además, ante los retos que presenta la globalización de la producción agropecuaria, es vital un mejor manejo de la sanidad e inocuidad del sector pecuario, tanto en especies mayores como menores, para que el país pueda competir en el mercado mundial de carne y para lograrlo, el ganado nacional requiere de una buena aportación nutricional que lo mantenga sano y fuerte.

Para estos fines, se hace imprescindible que el Estado implemente programas destinados a aumentar la producción de granos y oleaginosas al promover el uso de fórmulas nutricionales en la alimentación del hato nacional, a fin de que el desarrollo del sector pecuario siga cuesta arriba, como ha sucedido en los últimos años, particularmente en el subsector cárnico.

Por este motivo, es importante que el  rubro de alimentos balanceados de uso animal, de una buena vez, haga valer la importancia que tiene en la nutrición, sanidad e inocuidad del sector pecuario y  sobre todo,  en el sustento de la rentabilidad de la actividad ganadera en el mercado local  e internacional.

Así lo manifestó la presidenta de la Asociación Nacional de Fabricantes de Alimentos para Consumo Animal S.C (ANFACA), Lorena Delgado González, al abordar el tema de la importancia que tienen los alimentos balanceados en el éxito o fracaso de  la producción pecuaria de un país, con un campo en desarrollo como  el de México.

 

EL SUSTENTO

 

De entrada, la líder de los agroindustriales nacionales dedicados a la producción de fórmulas alimentarias para el ganado, señaló que la generación de alimentos acordes a las necesidades nutricionales de cada especie, conlleva al sustento de la sanidad e inocuidad del sector pecuario y como consecuencia, a generar un buen negocio para productores, comerciantes y a  cuidar la salud del consumidor.

Tras la pregunta de qué tan importante es la producción de alimentos balanceados en el desarrollo del sector pecuario nacional, Delgado González señaló que la producción de fórmulas para ganado se ha convertido a últimas fechas en un bastión importante para la actividad ganadera.

«La producción de alimentos balanceados es de alta trascendencia para el país porque de una buena alimentación depende el éxito o fracaso de la actividad; sin embargo, la sociedad no le da el lugar que merece en la cadena de valor en México, porque muchas veces nosotros tenemos la culpa al no dar a conocer sus fortalezas y el beneficio que conlleva el uso de este tipo de alimento en la producción de carne, leche y huevo», explicó Delgado González.

«Eso es culpa de nosotros, que no damos a conocer lo que hacemos y para qué sirven los productos que generamos», agregó la líder agroindustrial.

 

CADENA DE VALOR

 

Tras una pausa, retoma la explicación para recalcar que la fabricación de fórmulas alimentarias para ganado, es un eslabón muy importante en la cadena productiva porque de una buena alimentación depende que exista una buena sanidad en el hato y por ende, que la actividad pecuaria sea un buen negocio.

Cabe destacar, menciona, que el sector de los alimentos balanceados de México, por fortuna para el país y su gente, ha ido en franco ascenso no sólo a nivel local sino internacional, de tal suerte que actualmente ocupa el cuarto lugar a nivel internacional, dado que fabrica alrededor de 38 millones de toneladas, de las mil 069 millones de toneladas que produce el mercado global.

«Esta cantidad que se produce en México no es cosa menor y lo que es  más gratificante es que año con año aumenta este volumen de alimentos balanceados producidos, por lo que se espera que los agroindustriales mexicanos incrementen en un 3.5 % la producción en este ciclo productivo.

 

NO SOLO MEZCLAS

 

A la pregunta de lo que representan los alimentos balanceados para el sector pecuario en los temas económico, de desarrollo de la ganadería, de conversión en carne y leche, explicó que por desgracia, en el tema de la creación de fórmulas alimenticias para los animales, muchas veces en la sociedad mexicana se tiene la creencia que son sólo mezclas de granos para hacerle más apetecible la comida al ganado.

Sin embargo, dijo, son más que solo aperitivos para el animal. Son fórmulas que están bien balanceadas, fabricadas con insumos sumamente cuidados, la calidad de los mismos y algo muy importante, se preparan de tal manera que se tienen contemplados los resultados que darán en la conversión final de carne, leche o huevo.

Y un punto importante, aclara, finalmente, tras ser ingeridos por el ganado, se tiene la certeza de los resultados que darán no solo en la salud, peso y calidad del animal, sino también en el producto final que llegará a la mesa del consumidor,  porque se tiene la confianza en que no dañará su salud.

 

PRECIO FINAL

 

Y por supuesto, si en el tema alimentario y sanitario son importantes los alimentos balanceados, lo serán el bolsillo del productor porque a nivel económico, en la medida que  el agroindustrial sea más cuidadoso en la selección de los insumos y las cantidades de nutrientes que se mezclen, se ganará en el precio del producto final.

Actualmente, menciona, la alimentación representa alrededor del 70 por ciento del paquete tecnológico en el hato ganadero y hasta el 100 por ciento en el tema avícola.

Ante estos datos antes mencionados, señaló, pareciera que es poco el volumen que se produce en México; sin embargo no lo es, aunque se debe reconocer que se podría aumentar el consumo de recibir el pequeño y mediano ganadero capacitación y apoyo gubernamental, lo que sería de gran beneficio para los mexicanos.

Cabe hacer notar que el consumo de fórmulas no ha crecido de mejor manera en México debido a la manera de pensar del productor, a que muchos criadores no están inmersos en canales de comercialización, a la situación económica que priva en la mayoría del sector pecuario y a que, en muchos casos,  el ganado todavía consume mucho forraje, silos y otro tipo de alimentos que no son precisamente fórmulas.

 

INSUMOS IMPORTADOS

 

Por desgracia, apunta, los costos de producción de fórmulas y por ende de los alimentos balanceados no son accesibles para millones de ganaderos, esto, debido a que  desgraciadamente México no es autosuficiente en la mayor parte de los insumos para preparar las formulas y la mayor parte se importan.

Por ejemplo en granos y oleaginosas, se tienen que importar alrededor de 15 millones de toneladas, principalmente de Estados Unidos «no somos autosuficientes en los insumos; producimos las necesidades del país en el tema de maíz blanco para consumo humano, pero no en granos y oleaginosos como maíz amarillo y soya».

Tras la pregunta de por qué en el país no se conoce mucho de la fabricación de fórmulas alimentarias para animales, refirió que gran parte es culpa de los agroindustriales dedicados a este rubro que no han tenido una buena estrategia de difusión de su actividad, aunque cabe decir que sí se emite año con año un compendio de información con datos estadísticos de la industria y de lo que representa. Este se hace bilingüe porque también se envía a otros países.

«Creo que la información que generamos no ha sido suficiente, por lo tanto, tendremos que buscar otros mecanismos, otros medios de información, de tal forma que esta quede más a la mano», acotó Delgado González.

«¿Para qué? Para que en cierta forma generemos esa importancia de la fabricación de los alimentos balanceados, porque como decía, finalmente esta actividad repercute en lo que comemos todos los días los mexicanos», aceptó.

 

ACTUALIDAD DEL SECTOR

 

Por lo pronto, subrayó, el sector de los alimentos balanceados toma actualidad e importancia al plantear el nuevo gobierno la necesidad de que el país empiece la cuenta regresiva hacia la autosuficiencia alimentaria, aun cuando no haya ningún país que sea autosuficiente al 100 % en el mundo.

«No obstante, creo que debemos apuntar cada vez más a producir la mayor parte de los alimentos que consumimos para que tengamos una menor dependencia del exterior», expone Lorena Delgado.

«Ahorita, si bien producimos una gran parte de los alimentos que comemos, en la medida que crece la población, se torna cada vez más necesario que produzcamos más y que además seamos más eficientes en la generación de éstos», asienta.

«Y principalmente porque un sector bien alimentado  es más sano», apunta. «Definitivamente yo creo que la salud es primordial y eso nunca se debe dejar de  tomar en cuenta.   Yo digo que esa es otra de las cosas en la que ha habido mucha desinformación», acepta.

Por ejemplo dice, «nos ha tocado a la mayoría que producimos alimentos que nos han dicho,  bueno, ese grano ya no sirvió para el consumo humano, mándenlo al pecuario y  la verdad es que nosotros, en nuestros procesos, también exigimos que los insumos sean de la misma calidad que para la gente».

O sea, agrega, «volvemos a lo mismo, tenemos que pensar desde el punto de vista que estamos produciendo alimentos para consumo de la sociedad».

 

LA AUTOSUFICIENCIA

 

En síntesis, en primer lugar el sector de los alimentos balanceados es importante para alcanzar la autosuficiencia alimentaria; en segundo lugar, para tener un sector pecuario sano y en tercero, para lograr una mejor economía para el sector y obviamente para los productores de alimentos balanceados.

 

EL DATO

 

38 MILLONES de toneladas de alimentos balanceados se producen en México, de los mil 069 millones que se generan a nivel mundial. Para fortuna de los productores, agroindustriales y del país, la industria un 3.5 % anual.

Fuente: ANFACA

 

¿Por qué tienen que usar los ganaderos alimentos balanceados? «Porque los alimentos están formulados de tal forma que rindan lo que se necesita en el animal. Y si nosotros pensáramos desde un punto de vista nada más de rentabilidad, pues lo que más conviene es que estemos dándole las cantidades exactas de lo que necesita, por ejemplo la res, sin hacer ningún desperdicio».

«Pero principalmente, por la sanidad e inocuidad del animal y la salud de las personas que al  final consumen proteína animal».

«Y porque una manada sana dará mayor rendimiento para el productor y, repito, porque una alimentación balanceada del ganado, da seguridad en el tema de sanidad al productor y al consumidor».

¿Qué pasaría de no existir este rubro en el sector primario? «Sucedería lo que pasa en algunos países, por ejemplo en la República Dominicana, donde el sector pecuario importa prácticamente todos los insumos que requieren para alimentar a los pocos animales que producen y al final eso resulta en un producto sumamente costoso  para la población».

«Y eso pasaría en México, estaríamos con una alta dependencia de los productos del exterior y consecuencias negativas importantes en el sector pecuario y en la aportación de alimentos para los mexicanos y por otro lado, de haber una escasez de insumos, redundaría en un alto costo económico para el país».

¿El panorama que se le presenta al sector es bueno, malo o incierto? «En ANFACA estamos optimistas en que gracias al trabajo de los agroindustriales, las cosas sigan bien; que el sector siga con el crecimiento que ha tenido en los últimos años; sin embargo, hoy en día tenemos la incertidumbre de que las políticas que implemente el Estado realmente sean acordes a las necesidades del sector y sobre todo, que verdaderamente vengan a coadyuvar al crecimiento de este rubro».

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