Jalisco está a la vanguardia con diversas formas y apoyos para el cultivo del grano en la entidad, cuna del teocintle, ancestro del maíz
Guadalajara, Jalisco, a 29 de septiembre de 2021.- El maíz ocupa un lugar especial como actividad económica en la diversificación productiva del campo jalisciense, donde es factor que genera arraigo en el medio rural, además de su importancia en la cultura gastronómica.
Así lo expresó el encargado del despacho de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER Jalisco), Salvador Álvarez García, a propósito del Día Nacional del Maíz, el llamado grano líder de la canasta agropecuaria del país.
En el agro estatal se conjugan diversas formas de producción del maíz, desde los sembradíos de enfoque comercial, tanto para la obtención de grano, como para utilizar su forraje para la alimentación del ganado.
Además, tiene amplio uso en autoconsumo y como materia prima para platillos específicos, como el uso de granos nativos para el pozole y otros alimentos tradicionales.
Indicó que en algunos casos la siembra de granos nativos se ha apoyado con extensionistas del sistema milpa, lo que supone incluir otros productos, como frijol, calabaza y chile, entre otros.
Cifras oficiales reportan la siembra de 587 mil hectáreas de maíz en Jalisco en el ciclo primavera-verano. Se espera un rendimiento promedio de 5.9 toneladas por hectárea.
Fuente: Sader-Jalisco
Apunta que en Jalisco hay la presencia de uno de los centros mundiales de origen del maíz: la sierra de la biósfera de Manantlán es sitio de origen del teocintle,antecesor biológico del grano que conocemos actualmente.
Al respecto, el director de Fomento Agrícola, José Refugio Velázquez Vallín, apunta que la agricultura comercial del maíz vive un momento especial en el que se tiene la incorporación de distintos componentes de innovación tecnológica que le traen más productividad y también sustentabilidad.
Trajo a colación el uso de mejores semillas certificadas gracias a las cuales se obtienen mejores rendimientos del grano y del forraje y reforzó su aseveracón al hablar de unas parcelas demostrativasque dejaron rendimientos de 80 a 85 toneladas de materia orgánica (rastrojo) por hectáreas.
Expuso que además se abatieron costos con insumos biológicos, en este caso feromonas y microorganismos benéficos, tales como hongos, bacterias e insectos.
Expuso que en las principales regiones maiceras estatales, como La Ciénega, Valles y las sierras Occidental y de Amula, aumentan los rendimientos de ocho a 12 toneladas de grano por hectárea en base al uso de maquinaria de precisión y el estudio constante de la calidad de sus suelos para mejorar la fertilización.
Expuso que hay una tendencia en la agricultura actual -que ya tiene eco en los maiceros jaliscienses-, de reivindicar la fertilidad de los suelos a través de varios instrumentos técnicos, como la inclusión de materia orgánica y facilitar el equilibrio físico-químico de las tierras cultivables.
Entre los municipios jaliscienses líderes en la producción de maíz figuran: La Barca (28 mil 637 hectáreas), Tepatitlán (27 mil 623), Lagos (24 mil 745), Atotonilco el Alto (17 mil 176), Tlajomulco (14 mil 748), Jesús María (14 mil 290), Zapotlán del Rey (13 mil 834), Ameca (12 mil 743) y Cuquío (11 mil 531), entre otros, de acuerdo con cifras de la SADER federal.
EL TEOCINTLE ES DE JALISCO
En 1977 se colectó el teocintle Zea Diploperennis en San Miguel de Ayotitlán, municipio de Cuautitlán de García Barragán y en 1979 se publicó el descubrimiento como especie nueva por parte de los investigadores Rafael Guzmán, Hugh Iltis, John Doebley y B. Pazy, en la revista Science.