Los ovinocultores aseguran que la población de borregos ya se redujo 20 por ciento por los efectos de la falta de agua.
Mérida, Yucatán, 22 de abril del 2019.- Los ovinocultores de la región oriente del estado ya resienten los efectos de la fuerte sequía que padece esa parte de la geografía estatal, donde ya se presenta mortandad de animales.
Lo anterior lo informó Raúl Sansor Nah, presidente de la Asociación Ganadera Especializada en Ovinos de Tizimín, Yucatán (AGLEOTY), quien abundó que la población de borregos en esa región ya se redujo 20 % por los efectos de la falta de agua.
Indicó al periódico «Por Esto», que aunque los productores se prepararon con pacas y silos, calculan que la temporada de estiaje se alargue hasta julio, en vez de finalizar en mayo.
«Desde inicio del año, en enero, ya veíamos que venía fuerte la sequía y depuramos rebaños; a los animales improductivos había que sacarlos y hoy estamos menguados en población en un 20 por ciento», dijo Sansor Nah.
«Bajamos el número de animales y nos quedarnos con los que son necesarios y productivos y, los que no, pues había que desechar para ajustar la carga animales en los potreros, porque no es posible atenderlos a todos con las fuertes temperaturas», explicó.
El dirigente de los ovinocultores de Tizimín agregó que además cosecharon pasto maduro y lo ensilaron en microsilos, para tener reservas, «porque vemos que viene una sequía fuerte y prolongada. También proveemos de sombra y de techos a los animalitos porque ellos lo resienten mucho, sobre todo los rebaños al aire libre».
Sansor Nah agregó que prevén que la sequía seguirá hasta julio, en lugar de terminar en mayo y añadió:
«Nos preparamos desde enero para esta temporada de sequía, pero estamos en un momento crítico; es común ver en las redes sociales que se rematan carneros porque no hay capacidad para mantenerlos, tenemos menguada la población», señaló alarmado.