Según un estudio de la FAO, 42.5 millones de personas están subalimentadas en la región, sobre todo en Sudamérica.
Santiago de Chile, Chile, 18 de septiembre de 2017.- De acuerdo con el resultado del Estado de la Seguridad Alimentaria y Nutrición en el Mundo del 2017, aumentó el número de personas que sufren hambre en la región de América Latina y el Caribe.
Dicho estudio realizado por la FAO, con colaboración del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) y el Programa Mundial de los Alimentos (PMA), muestra que del 2015 al 2016, el número de personas que sufre de hambre en la región creció en 2.4 millones de personas, y afecta a un total de 42.5 millones.
El nuevo conjunto de datos muestra que el hambre en 2013 afectaba a 39.1 millones de personas (6.3 por ciento de la población regional), y luego subió a 40.1 millones en 2015 (6.3 por ciento) y llegó a los 42.5 millones en 2016, lo que representa el 6.6 por ciento de la población regional.
“El hambre aumenta en América Latina y el Caribe por primera vez en la última generación. Esto es inaceptable y todos los latinoamericanos y caribeños deberíamos sentirnos personalmente ofendidos por este retroceso. No podemos dar un paso atrás, poniendo en riesgo la salud, el bienestar o incluso la vida de miles de personas”, dijo el representante regional de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), Julio Berdegué.
El informe señala que si bien los niveles de hambre aún son bajos en América Latina y el Caribe, en comparación con el resto del mundo en desarrollo, hay señales claras de que esta situación se deteriora.
Según el estudio, este retroceso es especialmente fuerte en Sudamérica, donde el hambre creció de 5 por ciento en 2015 a 5.6 por ciento en 2016, lo que explica la mayor parte del aumento del hambre en la región.
“América Latina y el Caribe solía ser un líder mundial en la reducción del hambre. Ahora seguimos la preocupante tendencia mundial”, dijo Berdegué.
Según el representante regional de la FAO, la desaceleración económica de la región, producto de la caída de los precios de los commodities que exporta la región y la contracción económica mundial, han impactado la seguridad alimentaria de América Latina y el Caribe.