El relevo en la dirección de la Secretaría de Desarrollo Rural puso de manifiesto el progreso del campo jalisciense

Guadalajara, Jalisco, 05 de diciembre del 2018.- El relevo en la dirección de la Secretaría de Desarrollo Rural (SEDER) de Jalisco, puso de manifiesto que Jalisco es el Gigante Agroalimentario del país por el tesón de sus productores.

Así lo manifestó el secretario saliente, Héctor Padilla Gutiérrez al nuevo titular de la dependencia Alberto Esquer Gutiérrez, a quien el primero manifestó que políticas públicas y esfuerzo de los agroproductores fueron la clave para hacer productivo el campo.

Al presidir la entrega-recepción de la dependencia, Padilla Gutiérrez precisó que tiene un elevado respeto por la gente del campo y de la agroindustria estatal, con quienes logró buena coordinación y para quien fue un honor trabajar con ellos.

La marca de Jalisco Gigante Agropecuario del país, dijo que ya es reconocida como un referente nacional por el nuevo titular de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), Víctor Manuel Villalobos Arámbula.

Y precisamente esta marca, agregó, refleja que el sector agroalimentario jalisciense debe ser tomado en cuenta para bien de la sociedad nacional y de nuestro Estado, a lo que añadió que en Jalisco hay la cifra más alta de trabajadores agrícolas registrados en el IMSS, los cuales suman 96 mil.

Para fundamentar su afirmación, Padilla Gutiérrez manifestó que Jalisco refrendó su rol como productor de alimentos, reflejado en el aumento de su producción en la agricultura, ganadería, pesca y acuacultura para allegar más recursos a los campesinos.

Añadió que «por cada peso que se invirtió en el campo, el sector duplicó su valor y se han tenido avances de producción en más de 100 cultivos», además expuso que el valor de la producción jalisciense es superior a los 141 mil millones de pesos.

Las exportaciones de Jalisco suman cinco mil 607 millones de dólares, lo que representa 17.2 por ciento de los envíos nacionales al extranjero y por tanto.

Por ello, afirma, el campo jalisciense «no es estático, sino que tiene vida y al que deben  orientarse recursos del presupuesto para tener resultados favorables que lo hagan crecer, desarrollarse y dar frutos en beneficio de todos, principalmente de los jóvenes».

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