En la semana del 7 al 13 de julio, los mercados bursátiles de acciones y futuros agrícolas presentaron el siguiente comportamiento:
MERCADO DE FUTUROS AGRÍCOLAS
Los precios de los granos cayeron a niveles mínimos de varios años en el mercado de Chicago, extendiendo un descenso que lleva semanas luego de que el Departamento de Agricultura estadounidense (USDA) proyectó que los suministros globales excederán significativamente las expectativas.
Los futuros de soya cayeron a su nivel más bajo en casi dos años y medio, en una reacción bajista al reporte del USDA que mostró un incremento de los suministros de EUA y reafirmó expectativas de una enorme cosecha en otoño. El contrato a julio llegó a tocar los 12.4925 USD/Bu o 459 USD/ton, su nivel más bajo en una base continua desde el 16 de febrero de 2012, para posteriormente remontar ligeramente y cerrar la semana en 12.957 USD/Bu 476.75 o USD/ton, con una pérdida semanal de 6.7%; mientras que el contrato de soya a agosto cayó 8%, a 11.9575 USD/Bu o 439.36 USD/ton.
Los futuros del maíz en el mercado de Chicago cayeron también a mínimos en casi 4 años tras el reporte del USDA. El contrato a septiembre cerró con una caída de 7.63%, a 3.7825 USD/Bu o 148.91 USD/ton.
Los futuros del trigo también descendieron, con nuevos mínimos para el trigo duro rojo de invierno en Kansas y el trigo blando en Chicago por la presión que puso sobre el mercado el pronóstico del USDA de una producción mayor a la esperada.
El contrato para septiembre en Chicago perdió 9.23%, a 5.26 USD/Bu o 193.27 USD/ton, tocando un mínimo no visto desde el 16 de julio de 2010.
El gobierno de EUA proyectó el viernes abundantes suministros de granos y soya en EUA y a nivel mundial el próximo año, una tendencia que era anticipada por los mercados y que provocaron la caída de los precios.
El USDA estimó los inventarios de maíz en EUA para el 2014/15 en unas 45 millones de toneladas, por encima del promedio de las previsiones de analistas.
Las existencias finales de soya estadounidense en el 2014/15 se ubicaron en unas 11 millones de toneladas, cerca de las expectativas del mercado. De concretarse, la cifra sería la más alta desde el 2006/07.
El USDA no medirá las cosechas de maíz y soya hasta agosto, pero sugirió que una enorme producción y un incremento en los rendimientos podrían estar disponibles- si el clima coopera por varias semanas más.
“Las favorables condiciones para las cosechas y el clima a inicios de julio apoyaron un panorama de rendimientos récord a lo largo de gran parte de la región productora de maíz, no obstante, para la mayoría de la cosecha, el periodo de polinización será durante mediados y fines de julio”, dijo el USDA.
Por ahora, gran parte de la región productora de maíz y soya cuenta con abundante humedad para impulsar el desarrollo de la cosecha, situación que pesó a lo largo de la semana en los precios de los futuros y que, de acuerdo con los analistas, lo seguirá haciendo.
En el mercado de futuros de azúcar y café, la historia no fue diferente y también terminaron con pérdidas, aunque éstas fueron menores a las que se presentaron en Chicago.
El café arábigo en EUA cotizó cerca de mínimos de cinco meses; el café arábica para septiembre en EUA cayó 6.05%, a 1.614 USD/lb o 3,558.26 USD/ton; mientras que el café robusta para septiembre en Londres bajó 2.87%, a 1,997 USD/ton.
Los futuros del aromático descendieron por una acción técnica negativa, que incitó una ola liquidadora de posiciones.
En tanto, el azúcar sin refinar para octubre en EUA cayó 4.15%, a 17.07 USc/lb o 376.33 USD/ton ante una débil demanda y datos en Brasil que mostraron que la cosecha en el principal productor del mundo estaba cobrando fuerza; mientras que el azúcar blanca para agosto en Londres perdió 3.84%, a 448.30 USD/ton.
MERCADOS ACCIONARIOS
Los mercados mexicanos presentaron resultados negativos. La moneda cerró en 12.996 pesos por dólar, con una depreciación de 0.13% respecto a la semana previa; mientas que el principal índice accionario de la Bolsa Mexicana de Valores, IPC, tuvo una marginal caída semanal de 0.08%.
En la semana, los acontecimientos más notorios a nivel nacional fueron que el banco central de México mantuvo sin cambios su tasa de referencia, en línea con la expectativa del mercado, y que la firma del magnate Carlos Slim sorprendió al mercado anunciando su decisión de reducir su participación en el sector de telecomunicaciones de México, mediante la venta de parte de sus activos. El empresario dijo en una entrevista con Reuters que América Móvil buscará definir rápido una venta de activos en México, probablemente en menos de seis meses.
Asimismo, operadores señalaron que un avance de las leyes reglamentarias de una reforma energética considerada clave para la economía podría servir como catalizador a la moneda local. El Congreso mexicano concluyó el miércoles la aprobación de la letra chica de una reforma al sector telecomunicaciones, lo que deja a los parlamentarios en disposición para tramitar las energéticas.
En el plano internacional, destacaron los temores a que problemas en un importante banco portugués puedan derivar en una crisis financiera en la zona euro.
Con el Dow Jones y el S&P 500 cerca de máximos históricos, el descenso en las bolsas europeas disparado por las acciones del sector financiero se tradujo rápidamente en una venta generalizada en Wall Street.
Espírito Santo Financial Group, el mayor accionista del Banco Espírito Santo de Portugal, dijo el jueves que decidió suspender las transacciones de sus acciones y bonos, citando “dificultades materiales” de la compañía matriz ESI.
Las acciones del banco se desplomaron un 17.2%, y el índice referencial de la bolsa portuguesa se hundió un 4.18%.
Otro factor internacional que afectó, pero de manera positiva a los mercados, fueron las minutas de la reunión de la Reserva Federal de junio, que mostraron que el banco central comenzó a discutir cómo terminará su ciclo de relajamiento monetario.
La Fed indicó que pondrá fin a su programa de compras mensuales de bonos en octubre, y pareció estar cerca de un acuerdo respecto a un plan para manejar las tasas de interés en el futuro, de acuerdo a las minutas.
La finalización del programa de compra de bonos en octubre es una señal de la fortaleza de los EUA, la economía número uno a nivel mundial.
El promedio Dow Jones industrial bajó 0.73%, a 16,943.81 puntos, mientras que el índice S&P 500 retrocedió 0.9%, a 1,967.57 unidades y el índice Nasdaq Composite bajó 1.57%, a 4,415.490 unidades.